Miami puede perder sus playas si no se crea un plan urbanístico

Miami es una de las ciudades marítimas más reconocidas de Estados Unidos, especialmente por sus playas y su clima tropical durante todo el año.

Sin embargo, según Rafael Fornés, arquitecto cubano y ex profesor de la escuela de arquitectura de la Universidad de Miami, el desarrollo urbano de la ciudad pudiese aprovechar más del encanto de la línea costera como lo hacen otras ciudades marítimas estadounidenses, si no fuera por la construcción de edificaciones que muchas veces bloquean la salida al mar.

“La línea costera de Miami es muy incoherente y descaracterizada”, dijo Fornés, quien desde que se vinculó con la universidad hace 20 años se ha dedicado a estudiar la planificación urbana de la ciudad. Actualmente, Fornés es conferencista de la Facultad de Arquitectura y ha trabajado con sus estudiantes en distintos proyectos y ejercicios académicos.

Según Fornés, mientras que la ciudad debería desarrollarse desde el centro hacia el agua, está creciendo a la inversa, es decir, la construcción de grandes instalaciones y edificios comienza en la costa, obstruyendo la vista al agua y ocupando espacios que deberían ser de uso público.

La raíz del problema, dijo Fornés, está en el hecho de que en Miami no hay actualmente un plan estructurado de prediseño del espacio cívico de la ciudad.

“Miami esta gritando por la necesidad de un plan maestro”, dijo Fornés. “En Chicago, por ejemplo, la ciudad va creciendo pero por lo menos hay un prediseño de los espacios importantes para el público. Aquí no existe esa continuidad”.

Ricardo López, arquitecto del estudio privado Florez Lopez Architects y también conferencista de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Miami, está de acuerdo.

“Ahora que la ciudad tiene movimiento, necesitamos definir una visión que guíe todo el desarrollo para darle forma a los espacios públicos”, dijo López, quien considera que la bahía es “el espacio público más importante de la ciudad”.

El malecón de Miami, donde la tierra se encuentra con el agua, está según Fornés, “completamente invadido a nivel privado”, citando como ejemplos edificaciones inmensas como el American Airlines Arena y el Bayside Marketplace que reducen las vistas de la bahía de Biscayne y no tienen un paseo marítimo suficientemente extenso y conectado.

La falta de un plan urbanístico de la línea costera también ha creado un problema de acceso. Según explica Fornés, cuando se compran terrenos públicos cerca al agua con el fin de construir, las áreas que una vez fueron accesibles para el público se convierten en propiedad privada. A su vez, los condominios con vista al mar que se construyen cerca del agua solo los disfrutan los que pueden pagar por vivir en dichas viviendas.

Según Fornés, en el caso del downtown, esto no fue siempre así. Existen fotos antiguas de esa área de Miami donde se evidencia una extensa conexión de la ciudad con el mar, donde las vistas eran amplias, accesibles, y no obstruidas por condominios y grandes edificios. Hoy, dice Fornés, esa conexión esta “desaparecida” y “privatizada”.

Más recientemente, la ciudad ha debatido la construcción del museo del exilio cubano en la Parcela B, un terreno detrás del American Airlines Arena que ha permanecido sin uso por varios años. La acción más reciente en torno al debate fue una votación entre los comisionados del condado de Miami-Dade donde la mayoría llegó a un acuerdo de construcción que incluiría un museo y un parque.

“Es inaceptable. Es parte de esa fiebre de querer construir en el agua. No dudo que pueda haber alguien que combine el parque con el museo, pero ¿por qué existe esta obsesión de construir en el litoral, pegado al agua?” dijo Fornés, haciendo referencia también a la reciente propuesta de construir un estadio de fútbol en el downtown de Miami, que aunque fue rechazada, demuestra la tendencia de construir obstáculos entre la ciudad y el mar.

Leer artículo completo

Fuente: http://noticias.arq.com.mx/

[useful_banner_manager banners=6 count=1]

TYS MAGAZINE - Anunciantes

Jose Taboada

Licenciado en Geografía, Postgrado en Ordenación y Desarrollo Territorial (USC) y Master de Sostenibilidad y Responsabilidad Social Corporativa (USC).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba